Pedrosa muestra sus diversas inquietudes a través de una selección de cuarenta obras en la que se puede disfrutar de pintura, escultura y collage, pero en la que, igualmente, hay cabida para el libro de artista, las maquetas y los bocetos, creando una suerte de laboratorio que evidencia parte de su proceso creativo y permite que el espectador sea partícipe de los hitos por los que toda obra pasa hasta acabar definiéndose.

Detrás de cada una de estas piezas hay un profundo trabajo conceptual en el que no sólo está presente el creador sino, por supuesto, también el herrero y metalista que las hacen posibles. En esta ocasión, por ejemplo, ha sido fundamental la labor de José Carlos González Zazo, responsable de instalaciones del Museo, quien ha trabajado codo con codo con Pedrosa en la realización de esta exposición.

Otra de las novedades con las que el artista ha enriquecido este nuevo proyecto es a través de su pintura. Una pintura que, en esta ocasión, ha dejado de lado su versión más clásica en favor de aquella en la que el artista rompe con la bidimensionalidad y la perspectiva más tradicionales, dando como resultado obras con volúmenes y formas nuevas que sorprenden y entusiasman a partes iguales.

Un conjunto, en definitiva, muy rico en cuanto a materiales, técnicas y acabados que nos presenta a un artista con una larga trayectoria que, sin embargo, continúa explorando nuevos caminos en una búsqueda incansable.

En torno la exposición se han programado una serie de actividades para distintos públicos que darán comienzo este mismo domingo, 27 de noviembre, con una visita guiada que comenzará a las 12.30 h. También se editará un catálogo con textos de Javier Barón y Lluis Álvarez.

Recorrido

En la Sala A, el espectador podrá disfrutar de varias obras sobre panales de DM en las que el artista combina la pintura con pincel con otra a pistola. Un conjunto dinámico en el que el volumen emerge del soporte en su versión más pura y lineal. Esta sala se completa con dos esculturas de acero inoxidable, cuya verticalidad y limpieza compositiva muestran la parte más rigurosa y pulcra de Pedrosa.

En el patio del Palacio de Velarde se exponen, suspendidas, las denominadas Geometrías: un conjunto de formas que invaden el espacio arquitectónico a distintas alturas, tamaños y formas. La Sala B, por su parte, alberga otro conjunto, más colorido en esta ocasión, en el que presenta otros materiales, como el hierro, el metal o el papel. Así, en este espacio se puede ver un interesante libro de artista cuya portada está realizada en hierro y del que se exponen una decena de reproducciones hechas de nuevo por el artista.