Todo parte de un viaje. Un viaje real al que fue invitado el escritor: «Se me pidió que me instalara en un restaurante chino a las afueras de Kassel y me dedicara a escribir a la vista del público. La invitación fue tan rara… sin embargo, me permitió iniciar un viaje al centro mismo del arte contemporáneo de vanguardia».

Esta historia comienza cuando en el verano de 2012 una extraña llamada interrumpe la rutina de un escritor. La enigmática voz femenina al otro lado de la línea le dice que los McGuffin, matrimonio de millonarios que ejercen como mecenas en el planeta/arte, quieren invitarlo a cenar para desvelarle la solución al misterio del universo.

Pronto descubrirá que se trata de una convocatoria para participar en la Documenta, donde su cometido será convertirse en instalación artística viviente y sentarse a escribir cada mañana a la vista de todos en un restaurante.

Frente al pesimismo

En Kassel, el escritor comprueba sorprendido que su estado de ánimo no decae al atardecer y que, en cambio, el optimismo lo invade mientras pasea impulsado por una energía inagotable que late en el corazón de la exposición. Es la respuesta espontánea e imaginativa del arte que se levanta contra el pesimismo.

Inspirándose, según propia confesión, en la figura de Robert Walser y su libro El paseante, Vila-Matas, con humor, hondura y lucidez, cuenta la historia de una gran expedición: la del paseante solitario que, rodeado de rarezas y maravillas, se atreve a traducir un idioma que no conoce, participa en bailes invisibles, pernocta en su particular tierra prometida y, finalmente, encuentra un hogar en el camino.

Desde su terraza de Kassel, este paseante nos invita a ver el mundo desde otro ángulo y desvela la esencia misma de la literatura: la razón, la verdadera razón, para escribir.

Escenario ideal

«Este libro me ha permitido hacer un viaje por el arte contemporáneo y, al tiempo, trazar el escenario ideal para mis libros, que no es otro que situarlos en un ambiente en el que el lector tenga tiempo para pensar». Afirma el escritor, que considera que el «verdadero contemporáneo es aquel que está fuera de su tiempo y es capaz de verlo y criticarlo desde fuera».

En relación con la creación, Vila-Matas cree que el arte debería estar «en el centro de nuestras vidas» y apuesta por «saber mirar pues la curiosidad nos mantiene vivos». Cine, música y artes plásticas son otras herramientas para «abrir el mundo muchas veces hermético del escritor», puntualiza antes de recordar su escaso interés por el éxito: «una horterada directamente emparentada con el fracaso».

 

KasselKassel no invita a la lógica
Enrique Vila-Matas
Seix Barral
300 p
19,50 euros
E-pub: 12,99 euros