También es cierto que ni estamos ante la prosa de Jane Austen o de Dickens, ni es un libro redondo, pero en sus 350 páginas hay voz propia, buena literatura y una historia que engancha, algo muy poco habitual en una primera apuesta que por estas y otras razones –personajes inteligentemente construidos, ingeniosa estructura, prosa muchas veces luminosa, lectura fácil que incita a seguir en el relato…– reclama y merece atención.

La historia es, en principio, sencilla y lineal. Prudencia Prim, la señorita Prim del título, desembarca en San Ireneo de Arnois, un pequeño y perdido lugar, respondiendo a un anuncio del periódico en el que se solicita a una profesional para organizar la biblioteca del Hombre del Sillón.

Nada es lo que parece

En ese rincón, en principio lleno de encanto, se planta nuestra protagonista que poco a poco irá descubriendo que nada es lo que parece. Su nuevo jefe, el del Sillón, es un hombre inteligente y cultivado pero de profundas carencias en el trato. Sí, es amable y cortés, pero también muy dominante y ofensivo, da órdenes sin sentido y hace preguntas cuyo último significado no acierta a desentrañar.

Y cada uno de los habitantes de San Ireneo guarda secretos, recónditas peculiaridades y un denominador común: han decidido dar la espalda y declarar la guerra a las influencias del mundo moderno. Sus gentes forman una colonia de exiliados de la confusión y turbación del agitado vivir actual y se han empeñado en recuperar las tradiciones y volver a lo esencial.

Muchos han abandonado un pasado profesional de éxito para instalarse en el pueblo y dedicarse a lo que realmente desean hacer o, al menos, a lo que saben que es necesario hacer para contribuir al bienestar del lugar.

Una farmacéutica imparte clases de pintura; una antigua empresaria regenta una panadería; una periodista investiga la iconografía del medievo; un ama de casa es propietaria de un periódico vespertino. En San Ireneo de Arnois nadie trabaja más de cuatro o cinco horas al día. Los vecinos se reúnen para merendar frente a riquísimos pasteles y mantienen largas y estimulantes charlas. Nada allí resulta ser como uno esperaría que fuera: ni los maestros, ni los niños, ni …

Reconsiderar convicciones

El asombro, la perplejidad e incluso el desdén inicial de la recién llegada, irán virando y, lo que va experimentado con el trato y el tiempo pondrán a prueba su visión del mundo, sus ideas y temores más íntimos y sus más profundas convicciones.

«En cierto sentido siempre me he considerado a mí misma una mujer moderna; una mujer libre, independiente, llena de títulos académicos –comenta la protagonista–, pero tengo que reconocer que, al mismo tiempo, cargo siempre con una pesada sensación de nostalgia sobre los hombros, con un deseo de parar el paso del tiempo, de recuperar cosas perdidas. Con la conciencia de que todo, absolutamente todo, es parte de un sendero que no tiene vuelta atrás».

Se aludía en las primeras líneas de este artículo al aroma del XIX que desprende este libro. Vale la mención por el fondo y la forma de este relato sosegado que mima el lenguaje y por un punto de mira en el que juega papel principal la reflexión sobre algunos de los grandes temas de la vida, –el amor, la amistad, la filosofía, la trascendencia, la espiritualidad y la sensualidad de las cosas pequeñas–.

Pero al tiempo ese análisis, esa crítica del mundo moderno y sus peores demonios, la convierte en marcadamente contemporánea.

El despertar de la señorita Prim fue una de las sorpresas mayores de la última Feria de Frankfurt, hasta el punto de que lo largo de 2013 y 2014 saldrá a la venta en 70 países de la mano de algunas de las más prestigiosas editoriales internacionales.

 

PrimLa autora

Natalia Sanmartin Fenollera es periodista y ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en el ámbito de la información económica. Licenciada en Derecho por la ULC, es Máster en Periodismo por la Escuela de Periodismo de El País y la UAM. Ha estado al frente de las secciones Cinco Sentidos y Vida Profesional en el diario económico Cinco Días, donde actualmente es jefa de Opinión. Como queda apuntado, El despertar de la señorita Prim es su primera novela.

 

 

El despertar de la señorita Prim
Natalia Sanmartin Fenollera
Planeta
345 páginas