En el año 1900 se construyó en los arenales del muelle de Maliaño, en la zona portuaria de Santander el edificio que hoy es sede de la BCC. Edificado sobre un área de más de 12.000 metros cuadrados, el almacén de tabaco estaba conformado por ocho naves y era de estilo neomudéjar. Durante la Guerra Civil, se produjo un paréntesis, transformándose en cárcel para los prisioneros republicanos. Tras este periodo reanudó su uso original como almacén hasta 1986.

La rehabilitación del edificio es un ejemplo de arquitectura industrial reutilizada para albergar una institución cultural y los arquitectos encargados del proyecto fueron Eduardo de la Torre Alejano, Luciano Moreno Feu y Ricardo Urech Aguilar, siendo el coordinador del proyecto Manuel Martín-Rabadán Caballero. En la actualidad, el edificio alberga las instalaciones del Archivo Histórico Provincial y de la Biblioteca , separados por un patio central apto para el desarrollo de exposiciones y otro tipo de actividades culturales. La Biblioteca, de unos 9.000 m2,está situada en el lado derecho del edificio. Consta de dos plantas con espacios e instalaciones adaptados a los diferentes usos y servicios.