Se trata de una instalación audiovisual que gira en torno a la relación entre el cine y la pintura, poniendo en paralelo el origen de ambas disciplinas. La Dama de Corinto confronta la puesta en escena cinematográfica y la “puesta en escena” pictórica, en la que la pantalla es un lienzo donde ambas disciplinas se han soñado.

El título remite al origen mítico de la pintura referido por Plinio “el Viejo” en su Historia Natural. En él se cuenta que, ante la inminente partida de un muchacho a la guerra, su amada decide trazar el contorno de su sombra proyectada en la pared por la luz de una vela. Esa pintora originaria no trabajó a partir de la observación directa del modelo, sino a través de su proyección. En esa misteriosa elección, Guerín reconoce, por igual, el mito fundacional del cine. Un mito idóneo desde donde pensar y soñar la pantalla como lienzo.

Puesta en escena

dama_corintoEl montaje buscará que al menos una sala del museo tenga la apariencia de una galería de cuadros en penumbra con la singularidad de que los lienzos no reciben la luz sino que la transmiten. A través de la retroproyección son ellos quienes iluminan al espectador.

Cada pieza tiene una duración que oscila entre 10 segundos y 3 minutos, atendiendo a una disposición rítmica del recorrido, de su secuencialidad, mediante pausas, agrupaciones y aislamientos en el espacio, juego con las alturas y variaciones en las escalas y formatos y en la disposición espacial de las piezas.

Segovia. La Dama de Corinto. Museo Esteban Vicente. 

Del 16 de diciembre de 2010 al 24 de abril de 2011.