Entre las obras de la exposición está Cortinas "Redor", Aire, fuego, tierra y agua (1972) -pieza que ha sido recientemente reeditada en forma de libro-; Plaza Mayor. Análisis de un espacio (1974) -en colaboración con Esther Torrego, Carlos Piera, Simón Marchán y Juan Manuel Bonet-, una de las obras más importantes del conceptualismo en España y ejemplo de la vertiente interdisciplinar del artista; Itinerae (1975), Menorca, Elevar/mostrar (1976), Vegetal/Mineral (1976), Mirar/Escuchar (1976) y Señal/signo (1976).

Pionero en las prácticas conceptuales

La trayectoria artística de Alberto Corazón (Madrid, 1942) le sitúa como pionero en las prácticas conceptuales de nuestro país, tendencia que abandonaría a partir de 1979. Destaca como uno de los grandes creadores españoles de este momento, con una obra extensa que analiza  las nuevas relaciones entre el arte, el lenguaje, la naturaleza, la política y el objeto, y las nuevas prácticas artísticas que se relacionan con  los medios de comunicación y el arte sociológico. En estos años, su labor se centró en el desarrollo de los nuevos medios de reproducción mecánica a partir de los repertorios iconográficos de los mass media.

Corazón dio sus primeros pasos en el mundo artístico en la ya legendaria Librería Abril de la calle Arenal, donde conoció a artistas vinculados con el informalismo, Saura, Lucio Muñoz, músicos como Luis de Pablo o escritores como Celaya o Ferlosio. Estudiante en la antigua Universidad de la calle de San Bernardo, se licenció con una tesina dedica a los sistemas de comunicación no verbal que, como ha señalado Fernando Gómez Aguilera, "adelantaba sus intereses por la teoría de la comunicación" que tanta importancia iba a tener en el campo de las prácticas conceptuales.

Sus viajes por Francia, donde traba amistad con Antonio Saura o José Ortega, miembro de Estampa popular, y sobre todo por Italia en los 60 y comienzos de los 70, le iban a poner en contacto con las prácticas artísticas más vanguardistas del momento y los nuevos planteamientos sobre la accesibilidad de la obra artística al público. A partir de ese momento es cuando Alberto Corazón comenzó a plantease la  utilización de  las imágenes de los medios de comunicación de masas a través de la serigrafía con un planteamiento crítico sobre la realidad circundante basado en los análisis semiológicos y la teoría de la comunicación así como en la nueva cultura icónica.

Madrid y Barcelona

Esta exposición se suma a otras –El arte sucede. Origen de las prácticas conceptuales en España, 1965-1980 (MNCARS, 2005), La ilustración total. Arte conceptual de Moscú, 1960-1990 (Fundación Juan March, 2008), las individuales del mismo Alberto Corazón en el IVAM (2008), de Nacho Criado en el Círculo de Bellas Artes, Nacho Criado no existe-, y a la concesión del Premio Nacional de Artes Plásticas en 2007 a Valcárcel Medina, que están dando a conocer a las actuales generaciones aquella vanguardia artística, de carácter internacional, en la que Madrid y Barcelona jugaron un papel esencial en nuestro país.

La muestra -que permanecerá en la sala del Espacio Dos del Museo de Arte Contemporáneo hasta el próximo 15 de mayo- viene acompañada por un libro que incluye, además de un texto del profesor Simón Marchán, compañero de viaje de Alberto Corazón y autor del primer libro que sobre arte conceptual se escribió en nuestro país, un artículo del crítico Fernando Castro Florez y una cronología exhaustiva sobre este apasionante momento realizada por la comisaria de la exposición.

 

Cuando la idea prima sobre la realización

El arte conceptual se manifestó a través de una serie de tendencias -Process Art, Arte Povera, Body Art, Land Art, Fluxus, Perfomance Art- cuyo punto en común residía en que la idea primaba sobre la realización de la obra y donde los procedimientos utilizados por los artistas, notas, bocetos, maquetas, junto con documentos, planos, esquemas o películas tenía para ellos un interés superior al objeto acabado. La utilización de otras disciplinas en el ámbito de lo artístico como la filosofía, la sociología, la antropología, el psicoanálisis, la política, la lingüística, los mass-media, el diseño, la ecología, la música o los nuevos medios tecnológicos, video, cine, diapositivas, fotografía o fotocopia caracterizó las prácticas artísticas conceptuales frente a otras tendencias artísticas.  

 

Madrid. Alberto Corazón. Plaza Mayor y otras obras conceptuales de los años 70. Espacio Dos. Museo de Arte Contemporáneo (Centro Cultural Conde Duque).

Hasta el 25 de mayo.

Comisaria: María Luisa Argila.