Comisariado en su conjunto por Karina Romero, del Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, el proyecto refuerza los vínculos entre España y México y pone el foco en las aportaciones, saberes y presencia de las mujeres como motor y fundamento de las comunidades originarias.
En el MAN, donde lleva por título El ámbito humano, se exhiben piezas procedentes de museos y yacimientos arqueológicos fruto de investigaciones recientes, que abordan su presencia en el hogar y en la comunidad, su participación económica, ritual, funeraria y política: madres, cuidadoras, proveedoras, sanadoras, tejedoras, chamanas, depositarias de conocimiento, guerreras y gobernantes.
Esta exposición ofrece una mirada a las mujeres indígenas de las diversas culturas que desde hace más de tres milenios han habitado el actual territorio mexicano, a través de dos grandes ejes: Vida cotidiana y Linaje y poder.
El primero muestra cómo las mujeres, a partir de la división de género del trabajo, asumieron funciones esenciales: la educación de los hijos, el cuidado de ancianos, la elaboración de textiles y cerámica, la preparación de alimentos y la transmisión de conocimiento ritual y comunitario.
Las tareas cotidianas, lejos de ser secundarias, consolidaron la identidad y la cohesión social. A lo largo del ciclo de vida —infancia, juventud, adultez y vejez—, las mujeres participaron en ritos de paso que marcaban su rol en la comunidad. En la actualidad, además de mantener estas tradiciones, lideran movimientos de defensa territorial y cultural, demostrando una gran capacidad de adaptación y resistencia.
Linaje y poder aborda la participación femenina en las esferas políticas y religiosas. Aunque el poder formal fue predominantemente masculino, existieron mujeres que ejercieron autoridad y liderazgo, especialmente en las culturas maya, mixteca y mexica. Algunas fueron sacerdotisas, chamanas, gobernantes y guerreras, desempeñando funciones rituales y políticas de alto nivel. En el ámbito maya, por ejemplo, las mujeres organizaban ceremonias y banquetes diplomáticos, y en ciertos casos accedieron a la lectura y escritura.
Existieron mujeres gobernantes como la Señora Baah Pahk’ de Edzná, Yohl Ik Nahl de Palenque y las señoras Ix Ch’ak Ch’e’n y K’awiil Ajaw de Cobá, por mencionar algunas; en la Mixteca, la Señora 6 Mono consolidó alianzas políticas y militares; y en el mundo tolteca se recuerda a Xiuhtzatzin. En épocas posteriores, Tecuichpo, hija del tlatoani (gobernante supremo) mexica Moctezuma, viuda de Cuitláhuac y Cuauhtémoc, fue reconocida como libertadora del pueblo de Tlacopan, recibido en encomienda de la Corona española.
En conjunto, la sección expuesta en el Museo Arqueológico Nacional reivindica la presencia constante y multifacética de las mujeres indígenas, cuyo legado sostiene la memoria, la lengua y las tradiciones que conforman la riqueza cultural de México. Su historia, marcada por el trabajo, la espiritualidad y la resistencia, demuestra que su papel ha sido —y sigue siendo— fundamental en la construcción del ámbito humano y social del país.
Piezas destacadas
Entre las obras expuestas destacan la pareja de guerrera águila y guerrero jaguar de Tehuacán (Puebla), pequeñas terracotas olmecas —incluidas ancianas procedentes de la Costa del Golfo—, la sacerdotisa de Palenque (Chiapas), un portaincensario maya y el hallazgo escultórico reciente de la Joven de Amajac (Veracruz).
Estas piezas permiten profundizar en su protagonismo en la producción textil y cerámica, los rituales de paso y de linaje, los códigos de indumentaria y adorno de las élites y los sistemas de autoridad, prestigio y alianzas matrimoniales.
Además, en el Thyssen se presenta Señora Tz’aka’ab Ajaw, la ‘Reina Roja’ de Palenque, esposa de K’inich Janaab’ Pakal (Pakal el Grande), uno de los gobernantes más relevantes del siglo VII en esta ciudad maya de Chiapas. Procedente del Museo de Sitio de Palenque Alberto Ruz L’Huillier, su ajuar funerario incluye brazaletes, collares, la máscara mortuoria y otros objetos que subrayan su papel en la élite gobernante y la relevancia de las mujeres en la estructura política mesoamericana.
Por su parte, Casa de México acoge la muestra El ámbito divino, centrada en la espiritualidad y las prácticas rituales; mientras que el Instituto Cervantes se exhibe Historias tejidas, una exposición dedicada a la producción textil como lenguaje y transmisión cultural entre las mujeres indígenas.
Este gran proyecto expositivo y cultural —organizado por el Ministerio de Asuntos Exteriores de España, a través de la AECID, y el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, en colaboración con el Ministerio de Cultura español y la Secretaría General Iberoamericana— ofrece una mirada coral y poliédrica al universo femenino indígena, con un despliegue inédito de patrimonio, conocimiento, memoria e historia.



























