Ángela de la Cruz, residente en Londres desde 1989, optará a este galardón por una obra caracterizada por la deconstrucción de sus pinturas, que rompe, rasga y dobla para presentarlas como esculturas. La Tate nominó a la española por la exposición After que aún se puede contemplar en el Camden Arts Centre londinense, donde presenta una retrospectiva de sus obras en la que es su primera exposición individual en una galería pública en el Reino Unido.

Los otros finalistas

Además de De la Cruz, son finalistas en esta edición, que reconoce al mejor artista británico o residente en el país de menos de 50 años en función de su obra del último año, el inglés Dexter Dalwood, la escocesa Susan Philipsz y el dúo londinense Otolith Group.

La Tate Britain destacó que la artista gallega considera "el bastidor una extensión del cuerpo (humano)" y recordó que ya en su época de estudiante en Londres empezó a romper los bastidores de los cuadros "para liberarlos de los límites de ese soporte".

Los miembros del Jurado 2010 del premio son Isabel Carlos, directora del Centro de Arte Moderna (CAMJAP, Lisboa)
; Andrew Nairne, director ejecutivo de Estrategia de las Artes del Consejo de las Artes de Inglaterra; 
Polly Staple, director de la Chisenhale Gallery, y 
Philip Hensher, novelista y crítico de arte.

Accidente cerebral

Ángela de la Cruz estudió Filosofía en Santiago de Compostela, a pesar de que su deseo siempre fuera hacer Bellas Artes. En 1987 viajó a Inglaterra con un trabajo de au-pair para dos meses y luego se trasladó a Londres, donde estudió Bellas Artes en Goldsmith College y escultura en Slade School of Art. En 2004, su carrera artística se vio ralentizada tras sufrir un derrame cerebral.

Junto con Sol LeWitt, Tony Cragg y Anish Kapoor, es una de las artistas de la Lisson Gallery londinense.

Obras polémicas

El Premio Turner, dotado con un total de 44.300 euros (25.000 para el ganador y el resto para los finalistas), suele caracterizarse por la concurrencia de obras polémicas, como los animales en formol de Damien Hirst o la habitación con luces que se encendían y apagaban de Martin Creed.

Con el objetivo de impulsar el debate público sobre los nuevos desarrollos en el arte contemporáneo británico, este premio es ampliamente reconocido como uno de los más importantes y prestigiosos de las artes en Europa, aunque casi siempre genera enconadas y sesudas discusiones sobre la "verdadera naturaleza del arte".