Joss Stone

Su nuevo disco se llama Colour me free en referencia a su intento por marcharse de la discográfica EMI, que tendrá que esperar hasta el próximo disco. Pero también es una referencia colorista al disco, que, al igual que sus tres anteriores, suena alegre, bailable y es agradable de escuchar.

A pesar de que es una artista más comercial y cercana al mainstream, su música no está exenta de calidad y buen hacer. Para este último trabajo ha contado con colaboraciones de importantes nombres de la escena musical internacional. El guitarrista Jeff Beck y Sheila E. participan en una canción con esencia disco y tintes rock, Raphael Saadiq trae rhythm & blues de buen gusto, el veterano saxofonista David Sanborn hace lo que sabe hacer de la mejor manera, mientras que Jamie Hartman aporta el punto más pop al disco con su melancólica voz.

Mención especial merece la colaboración del rapero de Queens, NY, Nas. Colabora en una canción llamada Governmentalist, un corte con coros negros, guitarras afiliadas con alma de blues, cadencia constante pero suave y con una temática directa. Nas suelta una parrafada de aquellas que le hicieron famoso; controlando los tempos, los silencios, aliándose con el ritmo, puro sonido Queensbridge. Y, además, sigue en su cruzada personal y empeñado en lanzar un mensaje en todos sus raps: no hay lugar para la rima fácil ni para la temática mediocre. Una canción que derrocha kilos de buen gusto.

Free me y Could have been you también son dos de las mejores canciones del disco. La primera es marca de la casa; Joss Stone ya tiene un estilo propio por el que ser reconocida, y la segunda suena a tributo a Isaac Hayes, el piano y la temática recuerdan a ese magnífico Walk on by del compositor de Shaft.

Colour me free es un buen disco, que mejora con cada escucha y que merece el respeto y la acogida que está teniendo. Con tan solo 22 años, Joss Stone se ha consolidado como una artista talentosa, explosiva y con un futuro muy interesante.

Dionne Bromfield

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Dionne acaba de cumplir 14 años. Su primer disco se llama Introducing Dionne Bromfield, y está publicado por Lioness Records, la discográfica de Amy Winehouse. La banda que ha grabado con Dionne también es la misma que lleva Amy y, además, la aclamada cantante se ha encargado de dirigir la producción musical del disco de su joven pupila.

El álbum está compuesto por doce canciones clásicas del soul y el rhythm & blues, primordialmente femenino. Destacan temas como Mama Said y Foolish little girl, de The Shirelles; Ain’t no mountain high enough, de Marvin Gaye; My boy lollipop, de Millie Small, y unas cuantas joyas más que suenan especialmente bien.

La voz de Dionne es grave y envolvente, como la de Amy Winehouse, pero aún mantiene inocencia y todavía no suena trágica o dolida. Su técnica de canto es colorista, transmite la ilusión de quien graba un primer disco.

Futuro por delante

La joven chica tiene presente y futuro por delante. Recientemente ha vuelto a meterse en el estudio y va a grabar su nuevo disco, del que se desconoce si serán más versiones o temas originales. Lo que es seguro es que estamos ante una de las voces más prometedoras de los últimos tiempos, teniendo en cuenta la edad de Dionne. Si su carrera sigue el curso que debería y la pequeña Bromfield estudia música y se convierte en una compositora talentosa, podría convertirse en una de las divas del soul, de las que juegan en la liga de Aretha.

Por su lado, Amy Winehouse parece haberse distanciado timidamente de la mala vida y dicen que está preparando un nuevo trabajo, aunque sólo son rumores y no hay nada confirmado. Lo que es seguro es que al trabajar junto a la pequeña Dionne le deben de haber entrado ganas a ella de meterse en el estudio y sacarse de la manga algo al menos tan bueno como el Back to Black. De momento, disfrutemos de la pequeña Dionne.